Lo que hago y por qué lo hago
Creo en la especificidad.
Por mucho tiempo me consideré una mala fotógrafa (o peor aún, consideraba que no era una fotógrafa) porque no estaba obteniendo los resultados que quería en los trabajos que estaba haciendo. Por mucho tiempo dejé de tomar fotos, dejé de identificarme con la fotografía, y le creí a esos que me decían que para ser fotógrafo no era suficiente que te fuera bien en flickr. Y sí, tienen razón, tienen toda la razón. Ser fotógrafo es mucho más que eso. Pero después de mucho tiempo me di cuenta que el tema era que estaba aceptando trabajos para los cuales yo no era la fotógrafa adecuada. O trabajos que no eran adecuados para mí, que es casi lo mismo.
Me demoré mucho tiempo. Y fue a través de fotografiar a mi entorno cercano que supe que mi fuerte como fotógrafa estaba en la capacidad de transmitir emociones con mis fotos. El amor, la cercanía, la intimidad. Y pensé que quizás podía usar esa capacidad para retratar a otras familias, otras parejas. Y hasta ahora, ha funcionado. De eso se tratan las sesiones de amor. Tiene sentido, porque cuando pienso en mi otro gran amor fotográfico, tomar fotos de bandas en vivo, lo que hago es básicamente una sesión de amor de alguien que ama hacer lo que hace, sobre un escenario, frente a gente que ama lo que está escuchando y viendo. Esto es lo que quiero hacer, es en esta área donde quiero aprender y crecer. No me interesan las otras.
Con el diseño me pasó lo mismo. Hasta que encontré el lettering. Es esa área del diseño que me interesa, que me apasiona, donde quiero desarrollarme. Donde quiero ser mejor. Porque en ningún caso estoy diciendo que en estas dos áreas es donde soy seca. No. Tengo mucho por aprender, practicar, estudiar. Pero es más fácil hacerlo cuando sé que estoy sumergiéndome en un mundo acotado. Un área específica. Realmente creo que la gente que es seca, brillante, maestra en lo que hace, lo es porque encontró ese espacio acotado donde brilla. Y le dio, le dio, le dio, hasta que ese espacio se siente infinito.
Agregué a la barra lateral 3 banners que resumen lo que hago, lo que quiero hacer, ojalá para siempre. Las sesiones, los cuadritos de lettering, y próximamente un taller de fotografía. Estoy feliz, entusiasmada y con muchas ganas de aprender y enseñar.
Isa
13/08/2015Te leía y me hizo acordar de un momento super clave cuando decidí cambiar el rumbo en lo que hacía. Hubo un tiempo en el que estaba mal, triste, perdida laboralmente, todo oscuro. Empecé ir a terapia y una de las cosas que me dijo mi psicóloga es que yo era una persona muy sensible y que tenía que dejar de usarlo en mi contra y empezar a usarlo a mi favor. En ese momento no lo entendí, tenía una jefa de mierda que cuando llegó mi momento de partir, una de las cosas que me echó a la cara era ser “demasiado sensible” quién iba a saber en ese momento que esto sería el punta pié inicial para lo que me terminé convirtiendo, una fotógrafa de matrimonios, en donde esa cualidad me ha servido montones y puedo decir que vivo de eso, sin arrepentimientos. Cuesta encontrar lo que uno quiere ser, mucho porrazo de por medio, pero puta que se disfruta cuando uno hace lo que ama. Por eso me gusta leerte, siempre me anima saber que hay más gente allá afuera apasionada por la vida. Dale no más, que todo te está quedando bonito e irá quedando mejor, nunca hay que dejar de aprender 🙂