Hola: como muchos que te escriben acá, no te conozco, pero hoy te vi.
Supe que estaba embarazada más o menos en la misma época que tuviste a Félix. Es por eso que he seguido su evolución con una sensibilidad especial. Es mi primer hijo y estuve años buscándolo hasta que después de varios tratamientos, llegó. He tenido harta licencia porque he tenido algunos problemas, y he tenido tiempo para pensar harto en Félix, enviarle buenas energías, pensar qué pasaría si a mi me pasara algo así… y por otra parte, tomarme en serio el tema de la listeria.
La cosa es que hoy venía de una ecografía en la Indisa, bajando desde el 7º piso y de pronto el ascensor para y se abre aunque nadie lo había llamado. Siento que alguien mira, miro, y chan!! estas tú, y creo que también Félix en su sillita azul, al lado tuyo.
No te dije nada porque me da un poco de plancha. Simplemente el ascensor se cerró y seguí mi camino.
Sonreí porque al fin Félix se va a su casa y a mi me fue bacán en mi ecografía, sin desprendimientos, perfectamente sana. Aunque suene fácil decirlo ahora, yo sabía que todo iba a estar bien! Con tu guagua y con la mía. Te mando un abrazo muy grande y mis felicitaciones llenas de alegría por tener al Félix en la casa.