Una semana más

Si no sé cuándo empezó, no tengo cómo saber cuándo va a terminar.

Pero quiero que termine, o por lo menos que pare un rato. Quiero hacer lo necesario para que pare un rato, para tener un descanso. A veces los descansos duran años, ojalá esta vez sea así. Porque si pienso en esta depresión, esta última depresión, creo que ya son más de 2 años los que lleva susurrándome en la oreja.

No te mereces nada. No estás donde deberías estar. No eres suficiente. No eres buena. No eres linda. Todos estarían mejor si te murieras. Estás arruinándole la vida a tus hijos. Le arruinaste la vida a tu marido. Se merecen alguien mejor que tú. Mereces estar sola por querer estar sola. No hagas nada, porque nada tiene sentido. Te vas a morir porque te quieres morir.

Digo que son más de 2 años desde esta última depresión, pero ¿será que siempre ha sido la misma? Antes la vida arruinada por mi existencia era la de mis papás. ¿Será que siempre ha estado ahí en mi oreja, sólo hay veces en las que he decidido escucharla y otras en las que el ruido de afuera ha sido más fuerte? No lo sé, pero ya son más de 2 años y apenas escucho el ruido de afuera.

Decidí darme una semana más. Una última semana para quedarme acostada, comer en exceso, no hacer lo que tengo que hacer, no obligarme a responder mails y mensajes, haciendo estrictamente lo que se me da la gana hacer. Haciéndome daño incluso, si eso es lo que pide la voz. Algo así como una despedida. Una última semana pensando que sólo tomar remedios era suficiente. No escuchando a las personas que me quieren bien. Una última semana y ya está. Justo la semana en la que me debería llegar la regla. Ojalá mi sangre se lleve tanto más que sólo endometrio. Sólo una semana y ya llega septiembre, el calor, y mis ganas de intentar estar mejor. De hacer cosas que me hagan sentir mejor, de entrar en recesión de esta depresión que seguro va a volver en algún momento, pero que ojalá se demore.

Ya no puedo seguir dentro de mi cabeza que me traiciona, mañana tengo hora con una sicóloga nueva.

5 Comments

  • Cathy Flor

    27/08/2019

    Te Leo y me encuentro… llevo varias semanas en cama, rebuscando entre los pliegues de mis sábanas, las ganas de disfrutar la vida. En mi vientre habita la vida de mi tercer hijo, a mi lado hay un hombre maravilloso, estoy sana y profesionalmente estoy bastante bien… pero nada sacia el vacío. Hace mucho que no estaba, hace mucho que no se hacia presente esta sensación de insatisfacción completa.
    En mis oídos solo hay caos… por un lado me habla la pena, por el otro mis seres queridos “mostrándome” aquello que según ellos- no veo.
    Y me pregunto… qué más necesito?? Día a día despierto con el deseo de dejar atrás la pena y disfrutar la vida, pero mi motivación no está… y vuelvo a la pena y al llanto.
    Te mando un abrazo, amo tu trabajo, la mujer que eres y la familia que haz construido.
    Cariños

  • Maricela

    28/08/2019

    Nori, no estás sola.
    Somos muchas la que pensamos como tú, como si cargáramos una mochila pesadísima día a día. Un peso que congela y te detiene. El miedo y la pena te detiene.
    No estás sola en esta lucha diaria de completar un día más, cada día qué pasa es un día ganado… espero que el buen clima traiga nuevos aires a tu corazón, que despeje tus nubes y permita la luz del sol entrar a tu interior.
    Te quiero.

  • Fernando

    28/08/2019

    Y si fuera que el mundo interior que creas no encuentra salida adecuada, en tiempo, forma y espacio? Y si tu impresora factual no fuera tan potente como tu CPU virtual?
    De ser así, no sería depresión, sino una lenta, eterna y molesta implosión que te obliga a regenerar tu envoltorio para cada nueva fase…
    Por tanto tiene justificación el temor, ya que en cada cambio de piel ya no serias la misma ni para tí ni para nadie.
    Naciste para representar a tu generación, la más incierta y cambiante de hace muchas… y tus seguidores y amores dan testimonio de tu éxito en aquello.
    Por tanto es tu éxito el que te condena, no el fracaso.Te hemos amado por ello y con ello y por tanto deja la culpa y vive tu esencia.
    “Recomponerse” en plenitud como señalas, no serias tu y creo no podria adaptarme a ese sucedáneo…no busques por allí.
    Recoge los pedazos de este último cambio de piel y que te acompañarán en la nueva travesía por el puto desierto y parte ya!!! !!Empieza!! !!Joder!!…
    Mira que el temor no desaparece para los que ven y aman más allá de ellos mismos.
    Espero acompañarte si me dan las fuerzas.
    Te amo.

  • Vero de Roba

    29/08/2019

    Yo sé que no sirve de nada (créeme que lo sé) pero aún así te digo que todo pasa. Aunque sea más de una última semana, pasará. Eso espero.

  • Fran

    03/05/2020

    Acabo de terminar espécimen y que hermosura nori?

Leave A Comment

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.