contar la historia
Cada cierto tiempo vuelvo a contar la historia del Félix. La última vez fue hace unos días en taller, cuando las niñas se pusieron a hablar sobre sus hijos y sus embarazos y partos. Algo que pasa seguido cuando haces talleres con puras mujeres y una de las razones por las que me gusta hacer talleres con puras mujeres. La confianza que se genera para hablar de todo (no, no sólo hablamos de guaguas y partos)
Conté la historia y ya me sé más o menos las partes en las cuales la gente se sorprende: 26 semanas,